13/12/2023

Las celebraciones afectan nuestras emociones

Diciembre es un mes que para muchas de nosotras se convierte en una montaña rusa de emociones.
Estamos en el mes donde particularmente se convierte en algo intrigante, ya que se generan escenarios de nostalgia, alegría, reflexión y muchas otras emociones, esto se debe a que en nuestra mente está presente, que es el periodo que marca el cierre de un capítulo anual, pero que a su vez, es la pauta para un nuevo comienzo.

El inicio de esta montaña rusa.

Como lo he mencionado en un inicio, vemos este mes como una montaña rusa, y como tal pasamos por muchas etapas, de inicio es una subida, en la cual se ve a primera vista la emoción de las festividades, las reuniones familiares y las expectativas que se van construyendo conforme se acercan las celebraciones.

El punto más alto.

Al llegar a la cima, es encontrarnos justamente inmersas en las festividades, donde sentimos y vivimos la alegría por el hecho de estar disfrutando con los seres queridos, el abrir los regalos, culminar con metas y logros establecidos. La cima simboliza aquellos esfuerzos y conexiones que se han realizado durante todo el año que está a punto de concluir

El final se acerca.

Y como toda montaña rusa, está la bajada, en la que al ir descendiendo, nos encontramos en momentos de melancolía y reflexión. Pues diciembre es un momento que se vuelve efímero, ya que recordamos lo vivido en los 365 días de este periodo, logros, desafíos, aprendizajes, pérdidas, momentos de desequilibrio en las áreas de nuestra vida.

Un toque de emoción.

Pero no ignoremos que existen momentos inesperados y esta no es la excepción, una montaña rusa también puede dar giros inesperados, que vienen llenos de sorpresas y cambios. Estos momentos pueden añadir una complejidad o facilidad a este viaje llamado vida.
Considerando lo anterior, debemos tomar el mes de diciembre como el mes que nos invita a experimentar la plenitud de nuestra vida y de todo aquel trabajo vivido durante el año.
Abracemos el mes de diciembre como la despedida que llene nuestro corazón y mente de gratitud, satisfacción y esperanza para el siguiente año.
Si necesitas claridad y apoyo, agenda una cita conmigo, trabajaremos juntas para alcanzar tu bienestar emocional.